Monasterio Real de Santa María de Guadalupe (Extremadura, España)
11/02/2015El conjunto monacal consta de cuatro partes: el Templo-Basílica, el edificio del Auditorium, el Claustro Mudéjar y el Claustro Gótico.Es de estilo gótico-mudéjar y está flanqueado por ocho torres, entre las que destacan la de Santa Ana y la de Portería. El retablo del altar mayor es de gran belleza y está realizado en madera.
El sagrario del altar mayor es, en origen, un escritorio de Felipe II del siglo XVI. La sillería del coro, del siglo XVIII, es de dos pisos y de una excelente traza. La sacristía está profusamente decorada.
En la capilla de San Jerónimo se halla una de las obras más importantes de Zurbarán, ‘La Apoteosis de San Jerónimo’. El claustro, de forma rectangular, cuenta con dos cuerpos de arquería a cada lado.
Cada galería está formada por arcos túmidos encuadrados en alfiz, que se apoyan en pilares de base cuadrada con curiosas y originales aristas en chaflán. En el centro del patio de este claustro se erige un bello templete mudéjar, único en su estilo, construido en 1405 por Fray Juan de Sevilla. Llama la atención, dentro de este claustro, la Glorieta o Lavatorio cubierto con bóveda de crucería y con una solería realizada con alicatado mudéjar.
El que fuera antiguo refectorio del Monasterio de los Jerónimos está ocupado hoy por el Museo de Bordados, lugar donde se guardan más de doscientas piezas realizadas en el propio taller del Monasterio (frontales, casullas, dalmática…). Este Museo fue inaugurado en 1928 por el rey Alfonso XIII.
La antigua Sala Capitular es el lugar donde se encuentra el Museo de Miniados, considerado uno de los mejores del mundo, donde se exponen magníficamente cantorales de grandes dimensiones de los siglos XIV al XVIII y otras muestras de la intensa actividad del «Scriptorium» guadalupense, sobresaliendo el denominado «Libro de las horas del Prior», del siglo XVI.
Situado en la antigua repostería del Monasterio se encuentra el Museo de Esculturas y Pinturas; en él se exhibe una interesante colección de los fondos escultóricos y pictóricos del Monasterio desde el siglo XV al siglo XIX, con obras de Juan de Flandes, Zurbarán, Isebrant, Goya y, en lugar destacado, tres lienzos del Greco, que proceden de Talavera la Vieja. Hay también otros espacios museísticos dentro del Monasterio, entre los cuales sobresale la Sacristía, construida en el S. XVII, con pinturas murales de la Peña y Manuel Ruíz.
Sin embargo, lo que más atrae al visitante es la posibilidad de contemplar algunas de las obras realizadas por el célebre pintor extremeño de Fuente de Cantos Francisco de Zurbarán, que representan las virtudes de los Padres Jerónimos.
La actual Hospedería del Real Monasterio ocupa parte del llamado «Pabellón de la Enfermería Nueva», de principios del S. XVI, realizado exteriormente en mampostería y sillarejo, con torreones cilíndricos rematados por bellas tejas policromadas de cerámica vidriada. En el patio gótico, con influencias mudéjares y utilizado por la Hospedería del Monasterio, destacan sus bellas arquerías de tres pisos, siendo la parte inferior de arcos de traza preclásica y las del superior de estilo gótico. El comedor es obra del arquitecto Rafael Moneo.