Un crucero por el Nilo

Aunque su crucero por el Nilo se le torció a Linnet Ridgeway, el presuntuoso personaje de Muerte en el Nilo, pocos viajeros recuerdan con mal sabor de boca esta milenaria travesía.

Más de seis mil kilómetros recorre el inmenso río, que alcanza su máxima expresión en Egipto, especialmente entre Asuán y Luxor, donde no solo Agatha Christie situó la trama de su gran novela, también es el trayecto clásico de los cientos de barcos que invitan al viajero a disfrutar de unas cuantas noches (tres o cuatro) navegando. Y es que esta es la parte más mágica del gigante acuoso.

Sanctuary Nile Adventurer
El deck de Sanctuary Nile Adventurer, un espacio de lujo para observar los atardeceres en el Nilo. Sanctuary Retreats
Barcos Sanctuary Retreats.
Los barcos de Sanctuary Retreats. Sanctuary Retreats
No tiene precio disfrutar del atardecer atracado en Luxor, mientras docenas de falucas (barcos tradicionales) mecen sus velas a favor del viento. Tampoco la llegada en lancha a los templos de Philae o de Kom Ombo, solo dos de los tantísimos testigos faraónicos.

¿Qué marca la exclusividad en un crucero por el Nilo?
Y, aunque estas estampas las ofrezcan la mayoría de los cruceros, hay barcos y barcos. Verdaderos hoteles flotantes que marcan la diferencia, como es el caso de la pequeña y exclusiva flota de Sanctuary Retreats.

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