“Mañanas y Noches del Temple”, nuevo programa de actividades de verano en el castillo templario de Gardeny

Más de 30 propuestas que permiten descubrir la comunidad de frailes guerreros que vivieron en la Casa Templaria de la ciudad de Lleida

El Ayuntamiento de Lleida ha activado este mes de julio el programa de visitas dinamizadas diurnas y nocturnas al Castillo de los Templarios de Gardeny, que se concretan en más de 30 propuestas que permiten descubrir la comunidad de frailes guerreros que vivieron en la Casa Templaria de la meseta de Gardeny y disfrutar del entorno y el patrimonio templario en la ciudad de Lleida.

Estas propuestas, especialmente destinadas a las familias, buscan que el visitante se sienta como un templario y conozca de primera mano quiénes eran y cómo vivían estos caballeros medievales. La dinamización incluye un guía profesional, disfraces y útiles similares a los que utilizaban los templarios.

Las actividades diurnas constan de dos propuestas. Por un lado, la “Visita guiada a la poderosa Casa de Gardeny”, que se pueden reservar cada sábado, domingo y festivos (excepto el segundo domingo de cada mes). Se trata de una visita guiada histórica por las estancias y pasillos del castillo, al hilo de la actividad monacal y económica de los poderosos templarios de Gardeny. Y, por otro, la actividad “Templario por un día”, que se organiza cada segundo domingo de mes. Es una visita dinamizada de la mano de la entidad Nomon Turisme Cultural, y está especialmente recomendada para familias que quieran sentirse como un templario del siglo XIII.

En cuanto a las actividades nocturnas de verano, destacan las visitas del “Templario por una noche”, que es como la visita dinamizada de día, pero de noche. La actividad está limitada a 25 plazas por pase. La otra actividad nocturna son las vistas guiadas de los sábados, que son muy atractivas, porque además de permitir descubrir la historia de la casa templaria, nos sitúan, al atardecer, en un mirador privilegiado de la ciudad y la Huerta de Lleida como es la terraza del castillo templario.

Para disfrutar de las actividades de promoción del Castillo de los Templarios, que se intensifican durante el verano, las personas que lleguen con el Bus Turístico de la capital del Segrià tienen la entrada gratuita para poder visitar el castillo y disfrutar del audiovisual que cuenta la historia de los templarios.

El precio de las visitas dinamizadas es de 5 y 6 euros, aunque los menores de 13 años tienen acceso gratuito. Pero es imprescindible hacer reserva en Turisme de Lleida o en el correo electrónico: info@turismedelleida.cat y así informarse del calendario y los horarios.

La Casa Templaria de Lleida

Para conocer de quién estamos hablando, hay que saber que durante la segunda mitad del siglo XII la Orden del Temple levantó un complejo conventual en la estratégica colina de Gardeny. La elevación –que antes de nuestra era ya fue utilizada como base de operaciones militares– recibió la visita de brillantes estrategas como el propio Julio César, quien se enfrentó con los pompeyanos Afranio y Petreyo, instalados en Ilerda en el año 49 a.C. Durante los siglos XVII y XVIII, el antiguo recinto medieval fue ampliado y transformado en un nuevo fortín militar, cuyo diseño respondería a las nuevas necesidades defensivas que supuso la introducción de la artillería: murallas flanqueadas por baluartes y rodeadas de amplios espacios, fosas y muros de contención. La imagen actual de este conjunto monumental corresponde a los restos de lo que fue una imponente fortaleza.

El Castillo de Gardeny –junto con los de Miravet, Monzón, Peñíscola y la ciudad de Tortosa– forma parte de la ruta templaria Domus Templi. Este viaje a través del tiempo pone de manifiesto gran parte del patrimonio y legado templario de la antigua Corona de Aragón. La primera referencia de la Casa de Gardeny dataría del año 1156 y vivió un gran crecimiento, de modo que hacia el siglo XIII la Casa de Gardeny se convertiría en uno de los principales centros de decisión de la Corona de Aragón. El conjunto monumental de Gardeny constituye uno de los testimonios más destacados de la arquitectura templaria levantada en Catalunya durante la segunda mitad del siglo XII. Aunque entre los siglos XVII y XVIII se realizarían profundas modificaciones que terminarían alterando la antigua fisonomía del conjunto medieval.